Cacao

En el juego, cada jugador tiene un mazo individual de fichas de trabajadores cuadradas, y el número de trabajadores en cada lado de la ficha varía de una ficha a otra. El área de juego comienza con solo un par de fichas de la jungla en juego: un campo de cacao y un pequeño mercado; dos fichas de jungla se colocan boca arriba y las fichas de jungla restantes se apilan como una pila para robar.

En el turno de un jugador, coloca una de sus fichas de trabajador en el tablero adyacente a una o más fichas de jungla que ya están en juego, luego (si hay dos fichas de trabajador al lado de un espacio vacío) agrega una de las fichas de jungla al área de juego en este espacio. Luego, sus trabajadores se ponen a trabajar y entregan los resultados de su esfuerzo: si coloca trabajadores al lado de un campo de cacao, recibe uno o dos marcadores de cacao por trabajador; si están cerca de un mercado, puede optar por vender un marcador de cacao por trabajador al precio indicado; si al lado de un pozo, recibe agua; si están al lado de un templo, se ponen de pie y lucen bien hasta el final del juego; y así. Luego vuelve a llenar su mano de su mazo personal a tres fichas de trabajador.

Una vez que todos los jugadores hayan usado todas sus fichas de trabajadores, el juego termina. Los jugadores obtienen (o pierden) puntos en función de su suministro de agua, y cada templo recompensa a los jugadores que hayan enviado más trabajadores. Al final, quien haya recolectado la mayor cantidad de oro gana.